viernes, 11 de diciembre de 2009

El estrecho mundo de creer o no creer

Algo común entre la mayoría de las personas es que éstas creemos la mayoría de lo que nos dicen, sobre todo si está disfrazado o acompañado de algo en apariencia bueno. Error.

Desde hoy, mi idea de creer en lo que te dicen ha cambiado completamente, porque ahora pienso que detrás de cada palabra siempre hay un afán de destruir, de encargarte de echar por tierra las supuestas promesas que en un principio sonaron tan creíbles, y aunque quienes cometen esta clase de actos digan lo contrario, sus actitudes siempre se encargan de demostrar sus verdaderas intenciones.

Sírvase este breve escrito como una queja y denuncia ante aquellos que no tienen el valor de enfrentar lo que provocan, de evadir sus responsabilidad y de decir mentiras disfrazadas de verdades.

1 comentario:

  1. Ya ven? la entrada de mujeres desesperantes es un tanto parecida... pinche Don Señor... eres un Dios!!

    ResponderEliminar